Adictos Al Queso Y Diabetes

El queso es un producto lácteo que está lleno de grasa y colesterol. Por lo tanto, en una dieta para diabético es bueno evitarlo por completo. Algunas personas no tienen problemas en renunciar al queso otras están prácticamente adictas al mismo. ¿Porque? Veamos que ocurre con estos Adictos Al Queso Y Diabetes.

El queso contiene caseína, una proteína. Una proteína es una cadena de aminoácidos y, cuando se digieren la mayoría de las proteínas, la cadena se separa y los aminoácidos son absorbidos uno por uno en el torrente sanguíneo. La caseína es diferente.

En vez de romperse en aminoácidos individuales, la caseína se descompone en cadenas cortas de cuatro a siete aminoácidos cada una. Estas cadenas son biológicamente activas y tienen una acción narcótica suave.

Estos compuestos similares a la morfina se llaman casomorphins y algunos científicos creen que son responsables de la atracción por el queso. Sin embargo, todavía están tratando de comprender exactamente cómo funcionan.

Si se sigues una dieta para superar la diabetes tienes que dejar de comer queso en su totalidad. Si cambias a sustitutos de soja, asegúrete de que la soja 'queso' no contenga caseína (la proteína láctea).

Superando el impulso

La mejor manera de lidiar con los alimentos poco saludables como el azúcar, el queso y el chocolate es parar y dejarlos. Cuanto más tiempo te las arregles para permanecer lejos de ellos será mejor para ti, y tu deseo por ellos se desvanecerá (excepto tal vez por el rico chocolate).

Otros tres cosas que puedes hacer para ayudarte a dejar de estos alimentos son:

(1) Comer un desayuno decente y no te saltes las comidas. Si no lo haces así es más probable que cedas a esa barra de chocolate, esas galletas de queso o unas galletas azucaradas cuando te de hambre.

(2) Haz ejercicio regularmente, lo suficiente como para asegurar que obtengas una buena noche de sueño; la mayoría de las personas parecen estar de acuerdo que los antojos pueden ser más fuertes cuando no estás durmiendo bien

(3) Identificar que desencadena tu ansiedad para, o bien evitarlos o minimizar su impacto. Estos pueden incluir ver programas de cocina de televisión, ir al cine, ir a almorzar con colegas, y así sucesivamente. Aún debes participar en estas actividades, por supuesto, pero debes estar prevenido de que puedes ser tentado.